Habitaciones amplias y bien limpias con baño privado. Además, cuentan con un jardín🌳 y el personal es muy amable.

Nuestra habitación era moderna y de un tamaño decente, con un jardín y también un baño privado, justo lo que necesitabamos. Los desayunos con café interminable.

La comida estaba deliciosa y se servía en el comedor. Habitaciones de un tamaño decente y tranquilas con tanto un jardín como el cuarto de baño, y personal excelente. Tenía una ubicación céntrica en una zona agradable. Y lo suficientemente cerca de todas las atracciones principales y de centro ciudad y también de un parque.

Este lugar está muy bien ubicado en el campus universitario, muy cerca de zonas turísticas, lugares de interés y restaurantes.

buena ubicacion A 10 minutos andando de la catedral. parking dentro del recinto gratuito. entorno muy bonito tiene unos jardines precisos. el edificio es muy bonito de piedra. sin lujos tranquilo Y limpio ideal para dormir Y visitar la ciudad. sin mas pretensiones.

las habitaciones sin tv. aunque esto puede ser una ventaja en cuanto A la tranquilidad A la hora de descansar.

Estaba bien ubicado y con un precio en cuenta

En 3 noches no cambiaron las toallas No tenía wifi la habitación

La comida del comedor era deliciosa y la habitación era limpia, de un tamaño decente, con un bonito jardín y baño.

El precio en comparación con el resto de oferta hotelera en Compostela, y la tranquilidad del lugar, donde no existe ni un solo ruido.

Aunque conocía la austeridad del establecimiento, no estaría de más un juego de toallas decentes, y no las que ponen de antes de la guerra civil, y jabón o gel de ducha (solo había un frasco rellenable de jabón de manos mezclado con agua).

Es tranquilo, al menos en verano, ya que está ubicado en campus universitario

A pesar que por lo visto hay habitaciones renovadas, en la que estuve era antigua, sin ventilación (ya que daba a un patio interior cerrado), con muebles viejísimos, pequeña para ser habitación triple y sin prácticamente espacio entre el armario, la mesa y las camas. Baño también con necesidad de reformas. No repetiría!

La cama era muy cómoda, la habitación estaba muy limpia y enorme. La ubicación era perfecta, cerca de todos los sitios turísticos, el centro de la ciudad vieja y la estación de tren.

Por 65 euros la noche, nos dieron una habitación toda llena de moho, agujeros en el techo del cuarto de baño, estantería del cuarto de baño cogida con pañuelos de papel, las paredes descascarillándose, vamos, nada de lo que ponía en booking, ni en las fotos, al final nos cambiaron a otra habitación, pero negando que en booking apareciesen fotos de habitaciones triples, cosa que si aparecen y sin ningún desperfecto. No volveré a alojarme en esta hospedería.

El hotel(o albergue) es una especie de antiguo convento. Está todo lleno de monjas y de motivos religiosos. La habitación bastante básica. La zona está poco transitada, por lo que por la noche da un poco de cague. El personal eso si bastante simpático. Puedes aparcar dentro de la hospedería. Andando en 15 minutos estás en la Rua do Franco.

Demasiados motivos religiosos y silencio. Un poco alejado de todo.

El alojamiento tiene una ubicación céntrica en una zona tranquila, no muy lejos de cafeterías y del centro de la ciudad. La habitación es de buen tamaño con un baño privado y un jardín.

La hospederia se encuentra situada en una casa de oficios por lo que su ambiente es religioso. A nosotros no nos ha incomodado pero es de reseñar. Nosotros lo encontramos bien ya que hay comentarios que indican que es dificil de encontrar, creo que han debido de poner letreros para facilitar el acceso. La habilitacion nos recuerda a una habitacion en donde dormian los religiosos, es decir, como una celda de monasterios, sin lujos, el baño pequeño sin enchufes, pero bueno, para lo que lo queriamos era suficiente ya que solo ibamos a dormir. La verdad es que bien y es recomendable. El sitio es super tranquilo, coincidimos en las fiestas de santiago y aunque las facultades estaban cercanas (y los botellones) no escuchamos nada de nada. Es un lugar en donde hemos visto alojarse a peregrinos.

Lo peor ha sido que el baño fuese tan pequeño, y la ausencia de mas enchufes en la habitacion, solo hay uno. Solo es reseñable esto.

Facilidad de aparcamiento, cercanía al casco urbano

La recepción sólo esta abierta hasta las 23hrs, nosotros llegamos sobre esa hora y casi nos cuesta entrar, además el exterior de las instalaciones no estaba nada iluminado y nos costó dar con la entrada. La habitación era muy básica, sin tv y un baño pequeño, además había muchas humedades en las paredes y techo, lo que no hacía muy agradable la estancia. Para pasar una noche como mucho puede ser una opción, pero seguro que hay opciones mejores. El sitio es un claustro, no da impresión alguna de hotel o intento de convertirse en hotel.